miércoles, 16 de marzo de 2011

Semblanza de Javier Francisco Ortiz



Javier Francisco Ortiz nació en Costa Rica el 23 de marzo de 1953. A los trece años de edad ingresó al movimiento Scout, lo que le llevó a adquirir un profundo amor por la naturaleza. Al terminar la secundaria inició estudios universitarios de ingeniería e incursionó en el campo de la música como cantautor. Su primer tema en la radio, Vietnam, se convirtió en la primera canción “protesta” en llegar al primer lugar de preferencia de los costarricenses, adonde se mantuvo durante 17 semanas seguidas (1970).

Sin embargo, una experiencia vivida en 1971 cambió radicalmente su vida, le llevó a abandonar la música y la ingeniería y a dedicar su vida a investigar sobre la relación entre sexualidad y espiritualidad.

En 1979 terminó el bachillerato en sociología y se egresó de licenciatura en psicología y antropología sin encontrar lo que buscaba, por lo que viajó fuera de Costa Rica, decidido a realizar el propósito de su búsqueda.

El 9 de diciembre de 1980, Javier Francisco tuvo una visión que se convertiría en su propósito de vida: vio a la humanidad unida celebrando el Día Uno de una nueva civilización de paz.

Francisco se egresó del programa de doctorado del Instituto de Estudios Avanzados en Sexualidad Humana, del doctorado en Psicología Transpersonal y Ciencias Integrales de la Salud de la Universidad de Columbia del Pacífico y del Programa de Yoga Tibetana y Psicología Tántrica (Kum Nye) del Instituto Nyingma.  Asimismo, se certificó como kinesiólogo, masajista, hipnoterapeuta, digitopunturista, instructor del eneagrama de la personalidad e instructor de ashtanga yoga. Al finalizar su proceso de formación fue contactado por Joe Wilcox, maestro de una antigua tradición espiritual, quien le encomendó regresar a su país natal a realizar su visión.


India. 13 de Setiembre de 2009 Bajo el árbol de la iluminación del Buda 

Al regresar a Costa Rica fundó con sus hijos Edgar y Marianela y su esposa Ansu Patricia Coto el Centro de Balance Integral Gaia, el Instituto Holístico Gaia y la Fundación Gaia,  mediante los cuales se dedicó a crear un nuevo modelo de salud que incluyese la variable ambiental, a la promoción del desarrollo sostenible y a la educación a través del arte, la meditación y el yoga con consciencia planetaria. La Fundación Gaia fue declarada de Utilidad Pública para los intereses del Estado el 6 de mayo de 1991 por su aporte al Plan Nacional de Desarrollo de la República de Costa Rica.

   La misión de la Fundación Gaia se articula en el Proyecto Planeta Tierra, el cual fue declarado de interés público y nacional y se enmarca en la Iniciativa de la Carta de la Tierra, cuya misión es promover la transición hacia formas sostenibles de vida en una cultura global basada en el respeto y el cuidado de la comunidad de vida, la integridad ecológica, los derechos humanos universales y el respeto de la diversidad, la economía justa, la democracia y la paz.

Actualmente Javier Francisco se dedica a la planificación de la Celebración del Día Uno, a llevarse a cabo el 21 de diciembre del 2012 en ocasión del final del calendario maya; fecha en la cual se propone que la sociedad civil, la empresa privada y los gobernantes de Costa Rica firmen un Tratado de paz con la Tierra que incluya una agenda de nueve años para responder al reto de convertir a Costa Rica en Nación Carbono Neutral.

Como parte de dicho proyecto Francisco realizó una expedición para llevar el Yoga de la Tierra a la India con un grupo de costarricenses en setiembre del 2009. Dicha visita fue recibida con gran interés por las autoridades y los medios de comunicación a nivel mundial, provocando un efecto inusitado en el turismo del yoga en la India.

Gracias a este inesperado éxito y al apoyo de sus compañeros de viaje, Francisco logró obtener el financiamiento necesario para grabar y filmar el audiovisual El kit de la Tierra e iniciar la producción de su versión infantil, mediante los cuales se promueve y financia La Celebración del Día Uno.

Información adicional en la Línea de la Tierra 2224-0883



Una sola humanidad. Un solo propósito:
 firmar la paz con la Tierra
 

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